Este año he alcanzado los 50 años y, aunque me cause cierta incomodidad, parece que ahora me consideran una profesional senior.
Según LinkedIn, «el talento senior» se refiere a aquellos profesionales en una etapa avanzada de sus carreras, generalmente a partir de los 50 años en adelante.
Es evidente, ¡ya soy considerada senior!
Las coincidencias a menudo tienen un propósito. Mientras organizaba mis papeles, me encontré con este cuento. Una adaptación de una historia tradicional búlgara que me llevó a reflexionar sobre la importancia de reconocer y valorar el talento senior en las organizaciones.
Había una vez un rey muy cruel que decidió desterrar a todos los ancianos de su reino y enviarlos a vivir a un país remoto. Así lo informó a sus soldados. – Llévenlos lejos de aquí. No sirven para nada. Sólo comen y duermen, pero no trabajan -les ordenó y los amenazó con castigarlos si no obedecían. Todos siguieron sus instrucciones, excepto uno de ellos, llamado Janos, que amaba mucho a su padre. De modo que le acondicionó una habitación secreta en su casa y allí lo mantenía oculto con todos los cuidados necesarios.
Pasaron los meses y una gran sequía cayó sobre el reino. Los ríos y los lagos perdieron sus aguas, los árboles quedaron sin fruto y los graneros se vaciaron en cuestión de días. Preocupado por el riesgo de la hambruna, el rey llamó a los soldados.
– Les ordeno que encuentren trigo para alimentar al pueblo. De lo contrario los encerraré a todos en un calabozo.
Los soldados salieron, muy tristes, pues en realidad no había forma de cumplir ese mandato. Janos llegó cabizbajo a su casa y fue a la habitación donde su padre permanecía oculto.
– ¿Qué te pasa, hijo? – preguntó el anciano. Janos explicó en detalle la grave situación en que se hallaba-.
– No te preocupes, tengo una solución para ti- lo tranquilizó su padre-. Cuando trabajaba como labrador, hace muchos años, me llamaba la atención observar a las hormigas que llevaban cientos de granos de trigo a sus hormigueros. Diles a tus compañeros que abran todos los que encuentren en el campo y estarán llenos.
Sin revelar dónde había obtenido esa idea Janos fue con los demás soldados en busca de los hormigueros. A todos les alegró mucho encontrar grandes depósitos de trigo y llenar varios costales. Al día siguiente los presentaron al rey. Éste se sorprendió al oír la ingeniosa manera en que los habían conseguido.
– ¿Cómo se les ocurrió? – les preguntó.
– Fue idea de Janos – comentaron-.
– Explícame tú, entonces -ordenó el rey.
– Majestad, temo hacerlo pues sé que me castigará.
– Dime, y no te pasará nada malo -prometió el rey-, cada vez con más curiosidad. J
anos le contó que su padre anciano, a quien mantenía oculto en su casa, le había dado el consejo. El rey quedó en silencio por un largo rato y luego tomó la palabra.
– Ahora me doy cuenta que fui muy torpe al desterrar a los ancianos de este reino –reconoció-. Los conocimientos que han acumulado en su vida son una valiosa fuente de sabiduría.
De inmediato, ordenó que los ancianos desterrados regresaran a la ciudad y así ocurrió. Cuando pasó la sequía todos los habitantes recordaron que uno de ellos los había salvado de morir de hambre.
Este cuento me ha transmitido varios mensajes que refuerzan la necesidad de mantener el talento senior en las organizaciones:
- Experiencia y Sabiduría: El anciano padre de Janos, a pesar de su edad, posee conocimientos valiosos que resultan fundamentales en momentos de crisis. La historia destaca la importancia de la experiencia acumulada a lo largo de la vida y cómo esta puede ser una fuente invaluable de sabiduría. Yo, este año va a hacer 24 años que estoy en Solo. He desarrollado diferentes proyectos a lo largo de este año que, efectivamente, me han hecho tener experiencia y sabiduría. El camino continua.
- Solidaridad intergeneracional: La relación entre Janos y su padre refleja la importancia de la conexión y el respeto entre generaciones. A través de la colaboración y el cuidado mutuo, se demuestra que las personas mayores no solo merecen respeto, sino que también pueden contribuir significativamente a la resolución de problemas. En Solo somos un equipo senior que convive con otras generaciones. Desde esa experiencia y sabiduría aportamos los conocimientos necesarios y fomentamos la cooperación para resolver los problemas y situaciones que se nos plantean.
- Reconocimiento del error de la discriminación por edad: El rey reconoce su error al desterrar a los ancianos y comprende que la discriminación por edad fue una decisión equivocada. En Solo resaltamos la importancia de no subestimar ni menospreciar a las personas senior ya que aportan mucho valor a los equipos.
- Refuerzo del conocimiento acumulado: El cuento subraya cómo el conocimiento y las experiencias de las personas mayores pueden ser una fuente de soluciones innovadoras. En este caso, la idea de buscar trigo en los hormigueros provino de la experiencia pasada del anciano en la agricultura. Esto resalta la importancia de valorar y aprovechar el conocimiento acumulado a lo largo de los años. En Solo llevamos trabajando juntos 22 años. Hemos vivido mucho juntos, muchos momentos de los que hemos salido reforzados y esto nos hace tener unas vivencias compartidas que nos hacen estar donde estamos.
En síntesis, este relato promueve el respeto y reconocimiento hacia las personas de edad avanzada. Al establecer una analogía con el entorno empresarial, específicamente con individuos de 50 años en adelante, es crucial resaltar la valiosa contribución que pueden ofrecer al compartir su vasta experiencia y sabiduría, especialmente en situaciones desafiantes como las que nos pone delante el entorno que estamos viviendo actualmente.
Y en Solo, aún siendo seniors, seguimos apostando por la cooperación. Con ese foco, y para ampliar nuestro conocimiento, hemos hecho una alianza con Montse Pichot y su empresa Talent Senior. Su objetivo es formar parte de la trayectoria profesional de las personas a partir de 50 años y hasta que decidan dejar de trabajar.