De la primera a la cuarta generación
Una escalera con mucha pendiente
En este caso no os voy a hablar del choque generacional ni tampoco del relevo generacional en empresas familiares. Pero sí de una nueva generación.
Es estos días he tenido que trabajar con diferentes grupos la Gestión del Tiempo. No es una habilidad fácil de incorporar. Nos encontramos habitualmente con una falta de coherencia interna entre aquello que queremos y aquello que acabamos haciendo y ésto, para la gestión del tiempo, es un factor determinante.
Nos llegamos a sentir reconocidos por lo que hacemos. Por lo que el resto del mundo ve de nosotros y esto hace que actuemos por y para los otros. Somos la sociedad del hacer-hacer… “Por lo general, siempre esperamos que todos nuestros actos sean reconocidos por los demás como valiosos” dice Jorge Arce en su libro Estrella de la acción[i]
Para empezar trabajo 2 conceptos: Kronos y Kairós. Son 2 palabras que provienen del griego. La primera se refiere al tiempo cronológico o secuencial, la segunda significa el tiempo, el momento indeterminado donde las cosas especiales suceden. ¿qué tiempo gestionáis habitualmente, les pregunto? ¿qué tiempo os gustaría gestionar? Evidentemente, las repuestas, en la mayoría de los casos son Kronos a la primera pregunta y Kairós a la segunda.
Esta primera reflexión lleva al participante a cuestionarse sobre el “tengo que” y el “quiero”. ¿Cuánto actuamos por el tengo que y no por el quiero? Cambiar el lenguaje puede ayudarnos a cambiar nuestra manera de actuar.
Por otro lado, revisando el libro de Stephen R. Covey, Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva[ii], y en concreto el capítulo Primero lo primero, recuerdo un concepto interesante que no debo olvidar: “Cuatro generaciones en la gestión del tiempo. La primera podría caracterizarse por las notas y listas de tareas. La segunda podría caracterizarse por las agendas. La tercera refleja el campo actual de la administración del tiempo. Suma a las generaciones precedentes la idea esencial de priorizar, de clarificar valores, de comparar la importancia relativa de las actividades sobre la base de su relación con estos valores. Además, se centra en el establecimiento de metas, objetivos a largo, medio o corto plazo hacia los cuales se orientarán el tiempo y la energía, en armonía con los valores. La cuarta generación…la satisfacción depende tanto de la expectativa como de la realización.”
En el mejor de los casos estamos ya en el uso de la 3ª generación. Ya priorizamos. La cuestión es cómo: En función de quien me lo pide, de si me gusta más o menos, del tiempo que tardo en hacerlo… Es momento de recordar la Matriz de Eisenhower popularizada por Stephen R. Covey. Una técnica muy común para priorizar tareas en función de su urgencia e importancia. Lo Urgente implica temporalidad. Gestionamos el Kronos. Lo Importante está relacionado con las propias aspiraciones, con la autoestima… con el Kairós. La combinación de los 2 conceptos crea una matriz donde aparecen cuatro modos de priorizar. Cuanto mayor sea el cuadrante de Importante y no Urgente más nos estaremos acercando a la cuarta generación de la gestión del tiempo. Cuando nos ponemos en el centro, cuando cuidamos de nosotros mismos, de lo que nos apasiona, de lo que nos da sentido… dirigimos nuestras acciones a construir y darle forma a nuestro Kairós,
Este programa, Gestión del Tiempo, requiere de madurez y responsabilidad. Las cosas no cambiaran porque sí. Quizás no sea fácil. No pasa exclusivamente por gestionar nuestro tiempo, sino que pasa por gestionarnos a nosotros mismos. Ponernos en el centro supone cambiar muchas creencias sobre nosotros entre ellas sentirnos con todo el derecho de ser el centro, de sentirnos merecedores y ello y evitar gestionar nuestra vida en función de cómo seremos vistos.
El destino de nuestro Kairós es solo nuestro.
[i] Arce, Jorge. (2012). Estrella de la Acción. Alcuyo.
[ii] Covey, Stephen R. (1997).Ed. Paidós Ibérica.