Cómo responderías a la pregunta de ¿En qué tipo de empresa trabajas?, seguramente tu respuesta coincide con alguna de las siguientes tipologías existentes según:
- Su tamaño
- Su finalidad, lucrativa o no lucrativa
- A qué se dedica
- Cómo está organizada y estructurada
- Su estructura jurídica y social
Los mismos criterios tenemos en cuenta cuando nos reunimos con un cliente, nos ayudan a entender mejor la realidad de la empresa. Sin embargo nuestra mirada y diagnóstico incorpora otra tipología.
Para nosotros es importante observar cuál es el “mecanismo” de generación de valor de la empresa.
Me explico, clásicamente se define empresa como un organismo o institución que tiene como objetivo principal el producir bienes y/o prestar servicios que satisfagan las necesidades de una comunidad.
Nosotros en cambio entendemos una organización como un sistema humano y complejo que emerge en un determinado entorno para cumplir con un propósito. Su función es alcanzar su propósito de manera sostenible en el tiempo a través de un producto o servicio relacionándose con TODOS los actores relevantes de su entorno. Y para nosotros solo podrá alcanzar su propósito de manera sostenible si es capaz de generar valor. [i]
Esto lo puede hacer de muchas formas, puede hacerlo generando valor para todos los actores implicados o solo para unos cuantos (por ejemplo: los accionistas). Cuando hablamos de generar valor no lo vinculamos exclusivamente al resultado económico. Las empresas han de ser económicamente sostenibles para poder existir, y es lícito querer conseguir sus objetivos con el menor coste posible. Pero se ha entrado en una dinámica en la que se quiere conseguir un mayor resultado económico con menos costes sin pensar a costa de qué:
… del medio ambiente, de la calidad de nuestros productos y/o servicios, de beneficios inmediatos (a CP sin mirar el M y LP), de no tener tiempo para la conciliación, de nuestra salud (física y emocional) …
La sostenibilidad de una empresa se ha centrado básicamente en la sostenibilidad económica y/o de la preservación medioambiental. Y la dimensión emocional y relacional se ha negado hasta hace muy poco tanto en el mundo académico de las escuelas de negocio como en el profesional.
A nuestro entender una empresa sostenible en el tiempo es aquella que contempla las dos dimensiones (económica – V€ -y relacional –VR -) y que es capaz de generar valor para todos los grupos de interés: clientes, colaboradores, proveedores, accionistas, sociedad y medioambiente.
De ahí nuestro análisis y clasificación observando cómo responde a las dos dimensiones.
Según nos van explicando los clientes su situación actual y los motivos de la demanda nosotros vamos anotando información que nos da claridad de en qué dimensión está actualmente la empresa y cómo está dando respuesta a las que para nosotros son las palancas que permiten que la empresa genere Valor Total [i]:
- la Confianza como valor,
- la Gestión de relaciones y
- la Capacidad de adaptación y cambio.
En función de las dos dimensiones definimos 4 tipos genéricos de empresa y analizamos unos ítems correspondientes a cada palanca, veamos algunos ejemplos:
Hay empresas que destruyen valor económico y tienen un bajo valor relacional, a estas las podríamos llamar Empresas Moribundas, son aquellas que:
- aún gestionan desde un paradigma mecanicista
- sus resultados económicos son insuficientes
- no han sido capaces de escuchar las demandas del entorno
- no existe confianza interna
- hay miedo e incertidumbre
- la mayoría de relaciones son operativas, defensivas o excluyentes [ii]
- no hay una visión clara de destino
- y el nivel de cambio de la organización es de mantenimiento (cambiar cosas para que todo siga igual), según Etapas del cambio de E. Moliní.
Empresa no sostenible a corto plazo
También nos encontramos empresas que destruyen valor económico y tienen un valor relacional medio-alto a las que llamamos Empresas Insostenibles, este tipo de empresas tienen:
- márgenes insuficientes.
- alta escucha interna, no externa. Autocomplacencia
- presencia del valor confianza interna
- foco en el cuidado de las relaciones y con espacios de regulación relacional, pero al servicio de mantener forzosamente situaciones de consenso para que nada cambie
- dificultad en construir una visión clara de destino
- baja asunción del riesgo en determinadas decisiones.
- nivel de predisposición al cambio de la organización: Mejora (se gana eficiencia y eficacia en los procesos) según Etapas del cambio de E. Moliní
Empresa no sostenible a medio y largo plazo
En el otro extremo, es decir, con creación de valor económico y destrucción del valor relacional nos encontramos con las Empresas que denominamos Acumuladoras. Estas se caracterizan por tener:
- beneficios y alta rentabilidad (cuidado del accionista)
- deterioro de la confianza interna y/o externa (pierde el colaborador/cliente/proveedor)
- comunicación insuficiente, presión y estrés, dificultad para gestionar los conflictos, los colaboradores no tienen claridad en los objetivos
- poco o nula aportación a la sociedad/comunidad
- alta rotación y fuga del talento
- se caracterizan por ser innovadoras
- priman los objetivos individuales versus los objetivos comunes
- nivel de predisposición al cambio de la organización: Mantenimiento (hacer cambios para que nada cambie) según Etapas del cambio de E. Moliní
Desequilibrio: Existe ganancia económica pero no todos los actores son cuidados
Y por último tenemos a aquellas empresas que crean un valor económico sostenible y alto valor relacional, a estas las llamamos Empresas Generadoras. En ellas observamos:
- tienen integrado el pensamiento sistémico
- obtienen beneficios, rentabilidad a medio y largo plazo
- crean una cultura que genera valores como la confianza
- tienen conciencia y cuidado de las relaciones. [ii] Identifican a las personas de valor de la organización, manejan los conflictos, cuidan de la comunicación interna
- propician espacios de colaboración y co-creación internos y externos
- desarrollan cambio y sostenibilidad
- nivel de predisposición al cambio de la organización: Cambio (se cambia en la manera de hacer las cosas, cambiando procesos y organización interna) según Etapas del cambio de E. Moliní
¿Reconoces alguno de estos escenarios? Si ahora vuelves a hacerte la pregunta de ¿En qué tipo de empresa trabajas? Cómo responderías …
[i] Drapkin, Claudio: Verdades en Juego. Códice 2014
[ii] Quintana, Joan y Cisternas, Arnoldo: Relaciones Poderosas. Kairós 2014