“El valiente no es quien no siente miedo, sino aquel que conquista ese miedo.“
-Nelson Mandela-
Así como en la webinar 1 vimos la importancia de las conversaciones en entornos inciertos e identificamos las conversaciones clave para fortalecer a los equipos, en la webinar 2 nos centramos en las conversaciones valientes.
¿Qué entendemos por una conversación valiente?
Una conversación valiente, según nuestro punto de vista, es una conversación necesaria que implica una alta intensidad emocional y que supone factores importantes en juego. Que haya factores en juego significa que el impacto de una conversación valiente ya sea en las relaciones o en los resultados puede ser elevado.
En el trasfondo de una conversación valiente está el miedo en un mayor o menor grado. Puedo sentir inquietud porque no tengo claro como enfocar la conversación, porque afrontarla comporta salir mi zona de confort o porque tengo miedo a las consecuencias.
Si a pesar del miedo somo capaces de llevarlas a cabo, generaremos relaciones y empresas más valientes.
¿Qué conversaciones cuesta más llevarlas a cabo?;¿Qué dicen los managers?
Teniendo en cuenta nuestra experiencia trabajando con managers y preguntándoles proactivamente, hemos obtenido una lista de conversaciones valientes que incluyen un espectro amplio de contenidos (dar una mala noticia, pedir ayuda, hablar con un superior, reconocer algo bien hecho, poner límites…).
¿Hay un ranquing estándar de las conversaciones valientes?
La respuesta es NO.
Podemos estar bastante de acuerdo en la lista, otra cosa es en el ranquing de la misma. Constatamos que el ranquing es personal e intransferible. Cada uno de nosotros tiene su propio ranquing, fruto de su manera de ver el mundo y de su experiencia.
En consecuencia, de cara a tener una conversación valiente hemos de tener en cuenta en qué lugar del ranquing está la conversación para cada una de las partes.
¿Qué las hace difíciles?
Lo que hace que sean difíciles y que cueste llevarlas a cabo es el miedo. El miedo tiene como función es avisarnos y nos permite hacernos cargo de aquello que necesitamos.
Miedo a:
- No tener o perder el reconocimiento, los vínculos, el apoyo.
- A perder el control.
- Las emociones aflictivas (miedo, ira, tristeza etc..).
- No ser lo suficientemente bueno….
¿Qué actitud tengo ante el miedo?
Ante el miedo me puedo esconder, defender o abrir. Cuando me escondo o me defiendo suele ser porque tengo el juicio de valor de que el miedo y las emociones aflictivas son algo malo y/o tengo miedo al miedo.
¿Cómo abrirnos ante el miedo o cualquier emoción aflictiva?
El acrónimo RAIN, o lluvia de compasión, propuesto por Michele McDonald y popularizado por Tara Brach nos facilita tener una conversación con nuestro miedo:
1) Reconoce el miedo: ¿De qué tengo miedo?
2) Ábrete a él: ¿Cómo es?; ¿De qué me está avisando?
3) Indaga con amabilidad: ¿Cuál es tu necesidad?
4) Nútrete. Atiende a la necesidad: ¿De qué me quiero hacer cargo?
Seguir estos pasos nos permite conectamos con nosotros mismos y esto facilitará conectar con los demás.
Antes de tener una conversación valiente con otra persona necesito conversar conmigo mismo para escucharme, comprenderme y apoyarme.
¿Qué es vital para llevar a cabo una conversación valiente con éxito?
En la preparación es fundamental crear las condiciones necesarias para que ocurra lo que nos proponemos. Esto es, prepararse internamente y generar un espacio seguro y de confianza.
Durante la conversación proponemos ofrecer un sincero reconocimiento en el primer tramo de la conversación. Es importante estar muy atentos a las reacciones del otro para ser flexibles. Ser flexible puede suponer parar la conversación si consideramos que es lo más oportuno.
“En una conversación, lo que recibimos suele ser reflejo de lo que damos” -Anne Dickson-
Las relaciones humanas no son ciencias exactas, ahora bien, si tenemos en cuenta lo que hemos compartido hasta ahora es más probable que recibamos lo que hemos dado.
Si quieres ver la grabación del webinar entra en este link